Adaptación del cuento.

Érase una vez en un país muy muy lluvioso, un reino en el cual vivía un rey con su hija recién nacida .El país donde reinaban era Irlanda pero por desgracia la reina de aquel lluvioso pero magnífico lugar había fallecido a causa de una grave enfermedad que había en aquellos tiempos. El rey sentía la necesidad de darle una madre a su pequeña princesa cuyo nombre era Sally, y empezó a organizar fiestas para conocer a bellas damas capaces de criar a su hija.

Pasaron los años y el rey consiguió casarse con la condesa de Escocia. Sally creció siendo una niña muy sana y feliz, pero lo que destacaba sobre todo era su gran belleza. La condesa de Escocia en un principio se sentía muy admirada por el pueblo y su marido, pero al darse cuenta de que todo el mundo solo quería hablar de Sally empezó a sentir un poco de celos por ella.

Cuando Sally cumplió los 16 años, la condesa se dio cuenta de que todo el reino y su propio marido la adoraban más que a ella y por lo tanto decidió acabar con Sally para poder reinar ella sola.

Todas las noches cenaban el rey y la condesa con Sally en el gran salón de palacio. La comida se la cocinaban y servían los sirvientes. Una noche antes de la cena, la condesa bajó a las cocinas y le dijo a uno de los sirvientes que cuando tuviese la cena de Sally en la mano le pusiera un veneno que acabaría con su vida en pocos instantes.

El sirviente que conocía a Sally de muy pequeña le dio mucha pena y no le puso el veneno que le había entregado la condesa. Al terminar la cena, el sirviente acompaño a Sally a su habitación y le dijo…

“Sally la condesa ha intentado envenenarte. Me pidió que te pusiera veneno en la cena y no lo he hecho, pero por favor huye del reino lo más lejos que puedas porque va a intentar acabar con tu vida por todos los medios”

Sally asustada cogió una bolsa con un poco de comida y una manta y salió corriendo a los bosques de Irlanda.

Al llegar a los bosques Sally buscó un sitio donde poder refugiarse durante la noche. Sin embargo lo único que encontraba era lluvia, frío y mucha oscuridad. De repente empezó a escuchar unos cánticos que venían de lejos pero que podían suponer la salvación de Sally. La princesa siguió las voces hasta que vio una hoguera y unos chicos bailando alrededor de ella. Eran siete hombres y tenían un par de carpas parecidas a las que lleva la gente de circo, pero lo que más le sorprendió fue una caravana en la cual estaba escrito “ EL GRAN ESPECTÁCULO DE LOS HERMANOS FLYNN”. Ella se acerca lentamente y cuando ya está a la vista, los siete chicos dejan de bailar y se la quedan mirando atónitos.

“ Perdona que os moleste soy una criada y me he tenido que escapar de mi casa porque me trataban como a una rata. Llevo todo el día buscando un lugar donde refugiarme. ¿Os importa que pase aquí unos días hasta que encuentre un lugar seguro? “

Los chicos estaban bastante sorprendidos porque no entendían como una chica tan bella y con una voz tan dulce fuese una criada. Sin embargo aceptaron.

“ Claro señorita, usted se puede quedar con nosotros pero nos tiene que guardar un secreto…”

“¿ Que secreto?” dijo Sally.

“ Somos siete hermanos y vivimos del mundo del espectáculo. No es un gran espectáculo pero nos da algo de comer y el secreto es que nuestra actuación hace burla a la condesa de escocia que lo único que la interesa es su belleza y quedarse con el dinero del pueblo”

“ No os preocupéis. Yo me puedo encargar de las tareas del hogar y si queréis me enseñáis el espectáculo y yo me puedo encargar de presentaros” respondió Sally.

Los hermanos aceptaron ya que en el fondo les venía muy bien tener a una mujer en el grupo que limpiase un poco las carpas y la caravana, y que por lo menos supiese cocinar algo rico.

Con el paso de los días Sally se fue integrando bastante bien en el grupo. Con la caravana se movían de pueblo en pueblo y presentaban una pequeña obra de teatro cómica en la que se burlaba a la condesa. A Sally le enseñaron una pequeña presentación y siempre, antes de un espectáculo Sally se encargaba de darle la bienvenida al público.

Sin embargo, siempre que iban a un pueblo cercano al reino, Sally prefería quedarse en la carpa atendiendo a las tareas del hogar por si la condesa y el rey un día decidían ir a ver el espectáculo.

Con el paso del tiempo Sally cumplió los 18 años. Los hermanos empezaron a pelearse un poco ya que todos veían muy guapa a la joven Sally. El pequeño de los hermanos cuyo nombre era Máximo llevaba enamorado de Sally desde que la vio y un día decidió hablar con los seis para que por favor le dejaran conquistarla.

Sally y Máximo empezaron a pasar mucho más tiempo juntos, a dar largos paseos, a realizar todas las tareas juntos…y Sally al poco tiempo se enamoró perdidamente del joven y apuesto Máximo.

Un día pararon en el pueblo más cercano del reino,  en el que Sally solía pasear mucho cuando era pequeña, y por lo tanto decidió quedarse en la carpa atendiendo a las tareas del hogar.

Al rato Sally se empezó a preocupar ya que los hermanos no regresaban. Cuando se hizo de noche Sally vio cómo se acercaban pero algo raro pasaba…Venían corriendo y ensangrentados. Sally se acercó corriendo y solo consiguió contar a cinco de los siete hermanos. Faltaban Máximo y dos más.

“ ¿ Que ha pasado? Preguntó Sally angustiada.

"La condesa y el rey asistieron al espectáculo y al ver las burlas que le hacíamos a la condesa nos mandaron encarcelar. Nosotros hemos conseguido escapar pero los demás…"

Sally enseguida les curó las heridas. Los hermanos estaban desesperados porque no sabían cómo recuperar y salvar a sus hermanos, pero Sally tenía un plan.

“ Chicos yo sé cómo podemos recuperar al resto. Sólo necesito que me acerquéis a palacio”

“ ¿ Estás loca? ! Nos encarcelarán a todos!

“ No os preocupéis. Yo sé lo que hago.”

A la mañana siguiente, muy temprano, Sally y los cinco hermanos se dirigieron a palacio.

Cuando llegaron a las puertas de palacio varios guardias les pararon.

“ ¿A dónde vais?” preguntó el guardia.

“Venimos a ver al rey” respondió Sally.

“JA JA JA se reía el guardia. Tú no tienes ninguna invitación ni nada que deje que pases a ver al rey” dijo el guardia.

“Soy su hija” respondió Sally.

El guardia volvió a reírse ya que no se lo creía. El la conocía de muy pequeña y esa mujer no podía ser su hija. Sin embargo algo le llamaba la atención…Esa mujer era demasiado hermosa como para andar con esas ropas y además tenía algo en la mirada que le recordaba mucho a la pequeña Sally.

“Bueno pasad, pero que tengáis mucha suerte” dijo el Guardia.

Sally y los cinco hermanos entraron en palacio. Se dirigieron directamente a la sala principal donde se encontraba el trono del rey.

“¿ Estás segura de lo que haces?” Preguntó uno de los hermanos.

“ Sí no os preocupéis. El rey es mi padre.”

Los hermanos no daban crédito, sin embargo no dijeron nada y dejaron que Sally siguiese con su plan.

Al entrar en la sala el rey estaba sentado en el trono. Sally se acercó mirando al rey fijamente a los ojos.

“Su majestad, necesito que me ayude pues usted es el único que puede dar libertad a mis compañeros que ahora mismo se encuentran en sus mazmorras” dijo Sally.

“¿Pero quién es usted? Yo no voy a hacer nada por nadie que haya hecho algo malo”.

“Soy tu hija Sally. La condesa intentó envenenarme y por lo tanto tuve que huir de palacio. Esta noble gente me acogió y me han dado de comer todo este tiempo. Sin embargo el espectáculo que llevan a cabo los siete hermanos hace burla a la malvada condesa y por lo tanto han sido arrestados. Por favor papá ayúdame.”

“ ¡Mentirosa! Mi hija Sally falleció hace tiempo en un accidente a caballo. No la pienso ayudar señorita. Ya se puede marchar.”

Sally no se iba a dar por vencida. Empezó a narrar toda su infancia con su padre, lo mucho que le quería, la cantidad de cosas que les gustaba hacer juntos y también contó todos los secretos que compartían juntos.

El rey no daba crédito. Poco a poco se empezó  a dar cuenta de que aquella hermosa mujer tenía mucho parecido con su hija y con su fallecida esposa. Se le saltaron las lágrimas y corriendo se fundieron en un cálido abrazo padre e hija.

Enseguida mandó liberar a Máximo y al resto de los hermanos ya que habían acogido a su hija y habían cuidado de ella. Contaron como buenas las burlas que hacía el espectáculo a la condesa ya que esta ciertamente era malvada, y enseguida el rey mandó arrestarla y mandarla al calabozo.

Al cabo de un buen rato llegaron los demás hermanos y todos se abrazaron y lloraron. El rey les agradeció todo lo que habían hecho por su hija y les ofreció ser su guardia personal y vivir en palacio. Todos se alegraron muchísimo y con toda la alegría del mundo Sally y Máximo se dieron un beso de amor.

Máximo le pidió permiso al rey para poder casarse con su hija y el rey encantado les organizó la boda más bonita del reino. Finalmente Sally y Máximo se convirtieron en rey y reina y vivieron felices para el resto de su vida.

FIN .

Esta adaptación del cuento está enfocado principalmente a niños de 5/6 años en la última etapa de la educación infantil. Esto se debe a que el vocabulario empleado puede llegar a ser un poco más complejo para niños más pequeños y les puede costar entender algunos temas tratados en el cuento.
Los cambios que he hecho ha sido principalmente el lugar en el cual se desarrolla el cuento que es Irlanda. He cambiado el nombre de los protagonistas y la manera en la que intenta matar la madrastra a la protagonista. A su vez los 7 hermanos en vez de ser unos ladrones resulta que en vez de robar se dedican a hacer espectáculos para la sociedad.